No os voy a engañar, siento que he descubierto una auténtica gema para dejar en mi escritorio una vez la completo, volver de vez en cuando y disfrutar de un par de pantallas. Siento que premia tanto al jugador dedicado como al que no lo es tanto, permitiendo una total libertad de elección sobre qué pantallas hacer primero, premiarte por encontrar ciertos secretos… ¡Es exquisito!

Omitiendo eso que comentábamos del control del «salto alto», el resto se siente todo completamente sólido, aportando una jugabilidad perfecta a todos aquellos que decidan probarlo (a lo que desde The Art of Gaming os animamos).

Estamos ante un gun and run realmente divertido, que va incorporando nuevas peculiaridades en cada pantalla gracias al planteamiento de los componentes del PC. Nunca un antivirus ha sido tan entretenido, tanto en lo jugable, como a nivel visual, aunque en algunas ocasiones se sienta repetitivo, y queramos más variedad de armas, pero las fases extra de los clásicos son todo un acierto.

Byte the Bullet es un caramelito. Un run and gun divertido y efectivo, el tipo de juego que solemos decir que es ideal para la Switch o la Steam Deck, de esos que apetece echar unas partidas cortas para entretenerse sin resultar demasiado exigente. 

Una aventura retro cargada de nostalgia y desafíos en el interior de un ordenador infectado.

Byte The Bullet es una de las más gratas sorpresas de este 2024, un juego de acción y plataformas, simple en apariencia, pero realmente sólido y bien acabado. Frenético, emocionante y muy divertido de jugar.

Su humor afilado e irónico en la historia y los pequeños diálogos es una de sus principales armas, la otra es la enorme cantidad de referencias y homenajes a juegos clásicos de toda la vida. Desde Frog a Super Mario Bros, pasando por Doom o Prince of Persia, Byte The Bullet es una carta de amor al videojuego.

Byte the Bullet se siente un juego ideal para toda clase de jugadores. Una vez conocemos la dinámica del juego, completarlo nos puede llevar un par de tardes, pues el verdadero reto son completar los niveles y los enemigos finales son relativamente sencillos. El sistema de niveles permite a cualquier jugador empezar por donde quiera y la dificultad gradual no frustra a los inexpertos. Al coger un poco de confianza, el juego se vuelve más asequible.