Creo que los jugadores veteranos, hardcore, dedicados o como se quiera llamar obviamos con mucha facilidad juegos por su mero planteamiento infantil o juvenil, a pesar de que puedan atesorar una gran calidad. Y, concretamente, creo que con la saga que nos ocupa, no somos realmente conscientes o no estamos lo suficientemente orgullosos de lo que han conseguido desde Novarama con su franquicia estrella.
Lejos queda ya ese lastre de decir que InviZimals es una copia de Pokémon con realidad aumentada, porque aunque su inspiración fuese más que obvia en su momento, la saga de Novarama ha evolucionado, y nunca mejor dicho, por su propio camino, estableciendo unas bases que han sentado ya su propio estilo. Mentiría si dijese que soy un gran seguidor de la saga, porque apenas he trasteado con algunos de sus títulos, pero siempre me ha fascinado la dimensión -de la que creo no soy plenamente consciente- que ha alcanzado esta propiedad intelectual entre el público joven.
De hecho, este InviZimals: La Resistencia es el primer juego de la franquicia que he jugado en profundidad y aunque no pueda emitir una valoración personal comparativa con anteriores entregas, creo que puedo hacer una aportación interesante desde el punto de vista de un jugador veterano que se enfrenta por primera vez a este producto destinado, como decía, al público juvenil.
Queda claro que InviZimals está enfocado a un jugador pre-adolescente o adolescente, pero eso no es lo importante, lo verdaderamente importante es que está magistralmente diseñado para atraer a este público. Sería absurdo menospreciar el inteligente planteamiento que hace Novarama, fruto probablemente de la experiencia acumulada por ser esta nada menos que la sexta entrega de la saga, para saber como encandilar a este sector tan importante del espectro gamer.
En primer lugar es necesario destacar, como bien ha dicho el propio Daniel Sánchez Crespo -máximo responsable de Novarama– que PS Vita es una consola que parece haber sido diseñada para albergar el concepto InviZimals. Cabe recordar que esta saga nació en PSP, donde necesitaba de una cámara que se acoplaba a la consola para poder hacer uso de su leitmotiv, la realidad aumentada. Sin embargo la última portatil de Sony no sólo trae cámara trasera integrada, sino que incorpora también una cámara frontal, pantalla táctil, panel táctil y, por si fuera poco, en esta nueva entrega ya no es necesario el uso de las dichosas tarjetas de realidad aumentada, por lo que la libertad que tenemos para jugar es infinita.
Hablaba de inteligencia en el diseño y es que el modo historia de InviZimals: La Resistencia está planteado de modo que siempre tenemos algo nuevo que hacer, pero al mismo tiempo siempre tenemos algo conocido que repetir. La alternacia de capturar InviZimals, luchar con ellos en combates y torneos, mejorarlos, recoger nuevos objetos, mejorar nuestro nivel de cazador, capturar mejores InviZimals, mejorarlos, participar en mejores torneos, se convierte en una sucesión de eventos que siempre nos invita a jugar un rato más con nuestra PS Vita.
A todo esto, creo que no he explicado en qué consiste el juego. Básicamente tomemos la típica historia del protagonista que debe salvar el mundo -ahí si que no hay mucho donde rascar-, un cazador de monstruos que puede capturarlos para luchar por su causa, entrenarlos y mejorarlos para enfrentarse a otros monstruos en combates, torneos, etc. Los que disfrutamos con las mecánicas típicas de los RPGs como subir de nivel, adquirir nuevas habilidades, mejorar nuestros personajes, disfrutaremos como enanos -nunca mejor dicho- con este planteamiento.
Y es que sería inútil negar que aunque el juego esté destinado a un público juvenil, un jugador de cualquier edad puede disfrutar más de lo que se piensa con este juego. Yo mismo he disfrutado, y sigo disfrutando, de un juego que se convierte en un perfecto complemento para jugar partidas cortas -aunque sea durante largo rato- en cualquier momento. Capturar algún InviZimal nuevo, mejorar a nuestros favoritos y cambiar un poco de dinámica con los retos que propone el juego gracias a la realidad aumentada. Eso sí, a veces nos veremos obligados a dar algún que otro paseo por la habitación en la que estemos jugando, y quizás alguno puede ya no verse en la tesitura de realizar según qué acciones en según qué momentos.
El combate, aunque obviamente no es excesivamente profundo, he de confesar que me ha sorprendido por ser bastante más entretenido y variado de lo que me esperaba. Con los típicos ataques débiles / fuertes / rápidos / especiales tenemos una mecánica bastante más estratégica de lo que podamos pensar, y a menudo saber esquivar los ataques del contrario es bastante más importante que atacarlo sin más. Aunque claro, siempre podemos suplir todo ello con un InviZimal lo suficientemente potenciado para superar claramente a nuestro rival. De todas maneras, siempre es satisfactorio enfrentarse en condiciones similares, y de paso mejorar nuestros InviZimals más débiles.
Obviamente, este título tiene sus carencias y fallos, sobre todo en aspectos técnicos, y cualquier jugador habitual de videojuegos que supere la veintena tendrá productos mucho más adecuados a sus gustos para invertir su dinero, pero cualquiera que tenga la posibilidad de probarlo en la PS Vita de su hijo, sobrino o primo, no debería dejar de hacerlo porque realmente es un juego que nos hace pasar buenos ratos, a pesar de la ligereza de algunos de sus aspectos. Desde luego es un juego que me habría encantado tener hace 20 años, y probablemente sería el juego que le compraría a mis retoños para pasar un buen rato con una consola en las manos.
InviZimals: La Resistencia es un videojuego magníficamente pensado para encandilar a su público objetivo, repleto de contenido, divertido y adictivo de la mejor manera posible, y probablemente uno de los juegos que más y mejor partido saca de todas las funcionalidades de PS Vita.
Autor
Creador y Director de DeVuego. Padre. Informático. Ex-Vocalista de Death Metal. Pierdo el poco tiempo libre que tengo haciendo webs de videojuegos como esta.
