La aparición de nuevos estudios siempre es una buena noticia y más si se trata de estudiantes que, tras completar los estudios, han logrado publicar su primer videojuego comercial. Este es el caso de Square Keeper, el primer videojuego de Kanak.
Square Keeper nace como videojuego de móviles para un proyecto de estudios en ENTI, centro universitario centrado en el videojuego y adscrito a la Universidad de Barcelona. El videojuego llamó la atención de Jandusoft, el cual se ha encargado de publicar el juego en todas las plataformas.
Juega bien tus cartas
En Square Keeper controlamos a un guerrero que debe escapar de diferentes mazmorras repletas de monstruos. Para ello tendrá a su disposición una serie de cartas que puede utilizar para realizar diferentes acciones como moverse o atacar. ¿La dificultad? Las cartas son limitadas y habrá que calcular bien cada movimiento para acabar con los enemigos y salir de la mazmorra antes de agotarlas.
Las cartas podemos dividirlas en dos categorías: de movimiento, las que sólo nos permiten desplazarnos y de ataque, las cuales permiten acabar con los enemigos ya sea mediante la espada, el bastón mágico o el arco. Cada carta, además, cuenta con un pequeño numero que indica el alcance de la acción, es decir, si tenemos una carta con una espada y un 2, significa que el ataque tendrá dos casillas de alcance. Comprender el funcionamiento de cada carta y calcular bien el momento de uso de cada una es la mecánica principal de Square Keeper. Quizás lo más sorprendente de Square Keeper es que, partiendo de una premisa en apariencia tan simple, haya salido un juego tan sólido y redondo que engancha desde el primer nivel.
Square Keeper apuesta por un estilo gráfico en pixel-art notable que peca de falta de variedad: la mayor parte de las mazmorras son iguales y no hay variedad de entornos. Con el aspecto sonoro sucede algo similar, la música, bastante olvidable, es repetitiva y sólo funciona como acompañamiento de la aventura.
Una idea con potencial
El principal problema de Square Keeper es que se queda corto de contenido y deja el poso amargo de saber que la idea podría haber dado mucho más de sí. Los 40 niveles son muy disfrutables, pero no nos darán más de una o dos horas de entretenimiento, principalmente debido a que la dificultad media del juego es baja y rara vez tardaremos más de un par de minutos en superar las mazmorras. Mi percepción al terminar era que esos 40 niveles podrían haber sido el tutorial de un juego más grande y complejo.
Evidentemente Square Keeper deja este poso porque la jugabilidad es adictiva y como jugadores querremos más, lo cual habla de un gran trabajo por parte del estudio, pero es inevitable pensar que con más variedad de cartas, enemigos y escenarios más grandes y complejos podríamos estar hablando de un juego imprescindible. ¿Quizás para una segunda parte?
En cualquier caso, debemos siempre tener en cuenta que se trata de un proyecto de estudiantes, seguramente desarrollado con pocos recursos y que ha salido a un precio muy reducido. Square Keeper evidencia que en Kanak hay gente con talento que sabe desarrollar videojuegos y de la que podemos esperar grandes cosas en el futuro.
Conclusión
Square Keeper nos ofrece 40 niveles muy interesantes en los que tendremos que usar las cartas a nuestra disposición para escapar de mazmorras repletas de monstruos. Un juego que parte de una buena idea y cuenta con un gran diseño que me ha mantenido enganchado a la consola hasta que lo he completado. Una buena opción para pasar una tarde entretenida aunque deja la sensación de que ha faltado algo de ambición.
Autor
Pese a mi continua obsesión con la literatura, los videojuegos y el deporte, logré acabar mis estudios de filología. Resido en Italia y adoro la pizza.
