Molty, nuestro topo protagonista de Mail Mole, se dispone a disfrutar de unas largas y merecidas vacaciones. Ya con su mojito de zanahoria en la mano y la crema solar puesta, recibe una carta de que se le necesita urgentemente en Carrotland. Sin pensárselo dos veces, se enfunda su gorra y su cartera y parte hacía allí. Por algo es el cartero más rápido y tiene que seguir siéndolo.
Reparte cartas, come zanahorias y rompe cajas
El tutorial es sencillo, en él nos explican cómo movernos, cómo saltar y cómo romper cajas. Por medio de cañones nos trasladaremos de una fase a otra, pero para ello, hay que desbloquearlos.
La historia comienza cuando llegamos a Carrotland, núcleo central del juego y en el que tendremos “algo de paz” para charlar con los vecinos o comprar cosas. Allí nos comunican que no tienen electricidad y para ello hay que activar las torres de otras islas por medio de cartas con instrucciones. Evidentemente el encargado de llevar estas cartas es Molty.
Cada nivel está compuesto por cuestas, plataformas y montones de zanahorias, para llegar al buzón (fin de etapa) donde depositar la carta. También encontraremos 3 rábanos bien escondidos y algunos, peligrosamente protegidos. Al pillar esos rábanos, nuestra puntuación subirá, como también lo hará si entregamos la carta en un tiempo considerable. Nuestro topo tiene 3 corazones de vida, porque aunque no haya enemigos de fase, sí podemos caernos al agua o al vacío. Cuidadito.
Cuando tengamos suficientes zanahorias, podremos gastarlas en la tienda para poner guapete a nuestro Motly. Hay mil objetos y ropita con la que podremos vestirle (aunque como la mayor parte del tiempo va bajo tierra, la luce poquito).
No hay enemigos, en si, sí que hay jefes finales que tendremos que derrotar por medio de puzles de saltos y esquivas. Cada uno de una forma diferente y única.
Mail Mole: Ser un topo es divertido
Metidos ya en el mundo de Carrotland, nos encontramos con un plataformas 3D con un control maravilloso, en el que los saltos al milímetro invitan a jugar a todo el mundo y no se hace frustrante. En Pc tenemos dos maneras de controlar a este topillo: mando de XBOX y Teclado. He probado ambos y no puedo poner ni una pega. La gente de TalpaGames, lo ha balanceado y adaptado al 100% para la accesibilidad de todo el mundo. Si quieres que salte, el topillo salta, si tiene que hacer DASH, lo hace sin pestañear. Todo lo que tengamos que hacer en cada pantalla, lo hará sin forzar ni retardo alguno. Como digo, un control magnifico.
Cada nivel es diferente y tendremos al menos 2 maneras de llegar al buzón. Por poner un ejemplo: Hay niveles en los que podremos explorar despacito (no mucho, que el tiempo corre) para encontrar los rábanos y todas las zanahorias o bien, tirar por el carril de aceleración intentando pillar las zanahorias y llegando al buzón en cero coma.
Conclusiones
Mail Mole es un juego hecho para grandes y pequeños. Un plataformas 3D en el que cada nivel es un desafío, una experiencia visual y divertida. Puede recordar a un Mario y eso es lo que lo hace divertido, ya que en pc se ven poco este estilo de juegos bien hechos y con un control aceptable. Controlar a Motly es una autentica delicia. El estudio catalán TalpaGames ha sabido crear un juego maravilloso, en el que descubrir y salvar Carrotland a base de ir bajo tierra y pegar saltitos al milímetro, se convierta en un rato agradable y entretenido. La BSO es pegadiza y acompaña muy bien cada fase, así como los jefes finales, dignos y memorables.
Los colores y entornos de cada nivel son diferentes, por lo que lo único que se repite son las zanahorias, las miles de zanahorias diseminadas por cada nivel para recogerlas y poder comprar con ellas. Los puzles son sencillos: pulsar botones, recoger llaves… Por separado estas cosas pueden parecer poquito, pero juntas forman un juego en apariencia pequeño pero muy rejugable y recomendable.
Autor
Redactora en mis ratos libres en Orgullo Gamer, en DeVuego y en mi blog, de mi pasión favorita: los videojuegos. En mis ratos ocupada soy TCAE.
