PI.EXE: buenas intenciones víricas
Cada día que pasa agradezco más esas experiencias de juego cortas alejadas de tanto pozo de horas. He visto desde hace unos años para acá como muchos jugadores y jugadoras de todo el mundo piden experiencias ilimitadas, videojuegos que resultan ser un pozo interminable de horas, con miles de contenidos esparramados por su gigantesco mundo y con chorrocientas misiones secundarias de recadero para hacer.
Soy de esos jugadores que nunca ha llegado a completar al 100% uno de esos grandes juegos porque, sinceramente, al final lo que más disfruto es una buena historia bañada por una jugabilidad que enganche y raro es que acabe yo haciendo misiones de recadero para sacar todos los logros. Hoy estoy aquí para hablar de un pequeño juego que seguramente habrá sido toda una odisea para el joven estudio desarrollador de Jaén ZenBerry Games. Hoy toca hablar de PI.EXE.
A golpe de espada acabaremos con la corrupción
Una de las cosas que me ha gustado de PI.EXE es que va directo al grano: estamos aquí para acabar con una amenaza informática y, tras una leve introducción, rápidamente nos pondremos manos a la obra. Aquí lo importante es aprender a controlar a nuestra heroína que tendrá que vérselas contra una gran amenaza. Hay que decir que el juego salió el año pasado de manera gratuita pero que, con el paso de los meses, lo trabajaron y pulieron para añadir algunas correcciones y nuevos efectos y poder sacarlo a la venta como su primer desarrollo comercial.
Con una estructura basada en niveles el juego nos llevará por entornos llenos de neones (recordemos que estamos dentro de un ordenador) donde nuestro objetivo principal como software antivirus será el de encontrar la llave que abra la puerta al siguiente nivel. Pero no será fácil y es en lo jugable donde PI.EXE brilla con luz propia puesto que su sistema de ataque no solo sirve para deshacernos de nuestros enemigos sino que también afectará a nuestra movilidad.
Encadenar espadazos: la ley que nunca debemos saltarnos
En PI.EXE contamos con un arma letal para todos los virus: nuestra espada. Empuñar dicha arma nos ofrecerá algo muy interesante y es que no solo cortará por la mitad a nuestros enemigos sino que también servirá de dash. Al acertar un golpe nos impulsará hacia el lado al que acabamos de atacar y nos dará un impulso más con una cuenta atrás. Si volvemos a derrotar a otro enemigo volveremos a tener otro impulso más y así hasta que fallemos lo cuál nos hará quedar expuestos durante unos segundos mientras recargamos la energía (algo así como el frasco de Estus en Dark Souls).
Los niveles están pensados para que encadenemos golpes sin parar pero con un margen de error muy mínimo lo cuál convierte a PI.EXE en un auténtico deporte de riesgo solo apto para las personas más diestras e insistentes. Lo lógico es que fallemos más de una vez los ataques pero no os alertéis porque la carga es prácticamente inmediata dándonos una experiencia de juego constante, sin cortes ni cargas de nivel al morir.
En PI.EXE los pocos niveles que hay irán aumentando la dificultad, añadiendo nuevos enemigos y situaciones lo suficientemente originales como para generar otros 100 niveles más lo cuál me ha dado bastante pena. Cuando más interesantes se estaban poniendo me pusieron a luchar contra el jefe final el cuál también es todo un reto pero también el vaticinaba que se acercaba el final de la trama.
Neones y virus en HD
La verdad es que, siendo una propuesta visualmente sencilla, es muy efectiva dando al jugador todo lo que necesita sin tirar de alardes gráficos de última generación y eso ha jugado una muy buena baza con respecto al port en Switch el cuál se beneficia de todas las mejoras impuestas en esta edición de pago que ha llegado tanto a Pc como a la consola de Nintendo.
En cuanto al apartado sonoro he de decir que cumple con lo que se propone, siendo un acompañamiento perfecto para el tipo de juego que es, un juego rápido donde los reflejos lo son todo. En este tipo de situaciones unos buenos sintetizadores siempre llenan ese vacío para complementar a la perfección una propuesta indie como lo es PI.EXE, dando esa nota más “nostálgica” que hace que nuestro cerebro se relaje para pensar con claridad nuestro siguiente movimiento.
Conclusiones
Hay que ver el proyecto con cierta perspectiva puesto que se trata del primer videojuego comercial de un estudio pequeñito. Es una propuesta directa la cuál gustará mucho a las personas que suelen tirar por juegos de plataformas. La idea es algo que valoro mucho y me encanta su originalidad sobre todo cuando jugamos los últimos niveles o cuando nos enfrentamos al jefazo del juego. Pero no deja de ser una propuesta cortita que te dará poco más de 1 hora si eres tan malo como yo a los mandos dejando todo el peso de la rejugabilidad a un modo speedrun. Esperemos que este proyecto lleve al estudio a trabajar en una nueva historia.
Enlaces de interés
Autor
Hermano menor. Padre orgulloso de que su pequeña adore también los videojuegos tanto como yo. Cuando me dejan y la vida me lo permite escribo sobre videojuegos en DeVuego y anteriormente en Comunidad Xbox.
