Aureole. Jugando con las físicas

En numerosas ocasiones comentamos en DeVuego la enorme cantidad de grandes juegos que, por diferentes razones, pasan desapercibidos tanto para los medios como para el público. Hoy traigo uno de estos casos, un pequeño juego del que hasta hace una semana no había oído hablar y al que ahora mismo estoy completamente enganchado: Aureole.

Empecemos por el principio. Aureole es un juego desarrollado por ‘Elvendwarf‘ y disponible, de forma gratuita, tanto en Itch.io como Android desde el pasado septiembre. Pese a poder jugarse en el PC es un juego concebido para plataformas móviles y, tras haber jugado ambas versiones, recomiendo optar por Android.

Una maravilla oculta

No soy un gran jugador de móviles por una razón de peso: mi móvil es peor que una tostadora y rara vez un juego es compatible. Ojeando una tarde el calendario de DeVuego di con la ficha de Aureole y entré en su página de la tienda por curiosidad. Contra todo pronóstico vi que podía descargarlo. Para una vez que sucede, había que probarlo. Menos mal que lo hice, porque Aureole es un excelente ejemplo de videojuego simple en sus controles, pero adictivo como pocos. Llevo una semana jugando sin parar, intentando completar los 45 niveles de dificultad que ofrece.

Aureole nos narra la historia de un ángel que debe avisar a Dios de que los demonios están entrando en el reino. Desafortunadamente para él, antes de poder escapar acaba siendo asesinado de un flechazo. Del ángel sólo queda una aureola, la cual tendremos que llevar hasta el cielo.

Jugar a Aureole es jugar con las físicas. La aureola es un objeto inanimado que sólo podremos lanzar. La dificultad reside en lanzarla con precisión para que no caiga por algún precipicio o no toque algún obstáculo. Sólo tenemos un hándicap: el poder de la aureola es limitado y cada vez que la lanzamos dos veces tiene que tocar la tierra para recargarse.

Para lanzar la aureola simplemente tocaremos la pantalla y ésta saldrá despedida en la dirección indicada. Al inicio Aureole es fácil y placentero, pero este calentamiento dura poco. Rápidamente el juego se complica y tendremos que calcular milimétricamente las parábolas, los rebotes y cada uno de los lanzamientos ya que se nos requerirá una precisión absoluta. El trabajo de Elvendwarf en el diseño de niveles y la curva de dificultad es perfecto. Aureole es difícil desde muy pronto, pero nunca llega a ser desesperante o imposible; los diferentes obstáculos van llegando poco a poco y todo desemboca con un último mundo diabólico repleto de fases que, si bien al inicio nos parecerían imposibles, llegados a ese punto sólo requerirán de mucha concentración.

Los niveles de Aureole muestran un bonito trabajo en píxel-art dividido en tres mundos notablemente diferentes. Sin embargo, hay un par de aspectos gráficos que entorpecen la experiencia jugable. Por ejemplo, el movimiento de la cámara que enfoca a la aureola no siempre es preciso, quedándose detenida en ocasiones sin que podamos ver lo que hay delante o moviéndose de forma brusca.

Sin embargo, el problema principal de Aureole lo encontraremos en las fases en que hay oscuridad y nuestro campo de visión es reducido. La cuestión es que la parte ‘oscura’ tiene sombras que parecen ser el diseño del nivel, pero no lo son, confundiendo totalmente al jugador. Decenas de veces una sombra parecía indicar que en un lugar determinado había una plataforma sobre la que podar jugar y, sin embargo, al lanzar la aureola no había absolutamente nada.

Adictivo y barato

Lo mejor que puedo decir de Aureole es que, pese a la enorme cantidad de muertes que he cosechado, nunca he caído en la frustración. Con una mecánica muy simple, Elven ha diseñado un juego para pasar las horas enganchado al móvil que desearemos que nunca termine. Debido a la dificultad, los 45 niveles pueden llevarnos unas 5-6 horas aproximadamente si demostramos ser hábiles. No es mi caso, ya que llevo más tiempo y aún me quedan 4 niveles para terminar.

Para alargar la experiencia, contaremos con dos extras dignos de mención. El primero es un modo ranked en el que obtendremos una puntuación en base al tiempo que tardemos en completar tres niveles de dificultad media-alta. Al terminar, veremos un ranking online con los mejores jugadores. En segundo lugar, tendremos diferentes ‘skins’ para nuestra aureola que van desde un diamante hasta una pequeña cara de gato. Estas apariencias no se desbloquean en base a la habilidad, sino visualizando publicidad.

Si bien Aureole me ha encantado, hay un punto negativo, externo al juego que considero que debe mejorarse. Aurole es gratuito, pero contiene publicidad que aparece al iniciar el juego, al perder vidas o al desbloquear contenido, lo normal. Sin embargo, por 2€ tenemos la opción de eliminar la publicidad, un precio ridículo a tenor de la calidad del videojuego. Yo los pagué sin dudar demasiado. El problema es que no se quita toda la publicidad, sólo se reduce y, por ejemplo, al recargar vidas o desbloquear contenido tendremos que ver anuncios, cosa que me parece fatal. Por un lado, creo que si se ofrece la posibilidad de pagar para eliminar la publicidad, se debería eliminar toda. Por otro lado, si sólo va a desaparecer parcialmente la publicidad, se debe informar al comprador, algo que en Aureole no sucede. No voy a esconder mi descontento y frustración en algún momento al tener que consumir publicidad indeseada pese a haber comprado el producto.

Conclusión

Aureole es uno de los mejores juegos del año para plataformas móviles. Cuenta con un diseño perfecto para jugarse en una pantalla táctil y los niveles están diseñados con mucha habilidad. La curva de dificultad es perfecta para mantenernos enganchados durante horas. Recomendadísimo.