FICHA DE CRÍTICA

Sabemos que el Xbox Summer Live Arcade, como se ha comentado largo y tendido en estas mismas páginas, cierra sus puertas con títulos inolvidables. El año pasado hubo alguno que otro que todavía sigue sonando en las comunidades de aficionados interesadas en propuestas que se alejen de los tópicos. Viene a la cabeza Bastion, uno de esos títulos que nadie conocía y que hoy por hoy se ha convertido en un imprescindible del catálogo virtual de un poseedor de la sobremesa de Microsoft. Con Deathlight pasa exactamente lo mismo: esta vez su nombre había sonado como uno de los que estaban llamados a reventar el mercado gracias a un despliegue de calidad fuera de normal. Y no sólo por el peculiar estilo que emplea para representar la trama, sino por las condiciones técnicas que reúne, simplemente espectaculares. La relación calidad/precio aquí se justifica por sí misma sin opción a que nadie pueda obviar un secreto que poco a poco comieza a serlo a voces: a falta de grandes presupuestos, es imprescindible la originalidad y el talento para triunfar. Tequila Works su fantástico trabajo con Deadlight constituyen la prueba de ello.

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90
 
30/07/2012

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