FICHA DE CRÍTICA
Narita Boy es una propuesta maravillosa, tanto en su apartado jugable como en su narrativa. Su sistema de combate funciona que da gusto, fácil de comprender y con una amplia variedad de movimientos, dándonos suficientes posibilidades, sin llegar a abrumar. Al mismo modo, sus enemigos son fáciles de reconocer, haciendo que sus peculiaridades sean detectables al momento, facilitando la comunicación entre juego y jugador para decidir como afrontar cada encuentro.
Leer en su medio original
90