FICHA DE CRÍTICA
Gráficamente, Pro Rally es un espectáculo para la vista. Los coches deslumbran, los circuitos nos transportan a cada paraje y la sensación de velocidad es perfecta. Pero el juego flojea en la física de los coches, que exige pericia al volante y mucho control: aunque a veces saldrás volando de la carretera igualmente. Eso sí, entra bien por los ojos.
85
 
Disponible online en Archive.org