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Twogether es un estupendo trabajo de debut para Flaming Llama. Una aventura que sorprende por el ingenioso planteamiento de sus puzles y la combinación de dos personajes. Sin embargo, se trata sólo de un capítulo, y tiene una duración muy limitada. También nos hubiera gustado mayor variedad en el diseño de las estancias y las trampas.

Itadaki Smash es un "beat´em up"de inspiración clásica, con una línea artística cuidada y numerosos guiños, que resulta divertido, pero se queda corto en la profundidad de los combates o el sistema de progreso de los personajes.

Se nota el cariño puesto en cada elemento de Narita Boy: sus espectaculares diseños pixelart con animaciones a mano, el desarrollo que alterna combates, plataformas y backtracking, las referencias a los 80 y una historia conmovedora.

El estudio Fractal Fall nos brinda un "shooter" aéreo lleno de buenas ideas, que alcanza el notable en muchos aspectos, pero que tropieza con unas mecánicas de disparo demasiado simples. Destacan sus escenarios intrincados y muy coloridos, y el diseño de su protagonista, Esen.

Un estupendo juego de puzles, con una ambientación inspirada en los clásicos de la ciencia ficción y una ejecución muy notable. Puede volverse repetitivo en sesiones largas.

Un juego relajado y lleno de cariño, que combina crafting, cultivo, ganadería y exploración. No es tan ambicioso como Animal Crossing, pero ha conseguido que nos traslademos a su mundo y disfrutemos de una vida más relajada.

Es difícil convertir un tema tan serio como el éxodo de refugiados de Siria en un videojuego. Massira, un desarrollo que ha contado con el apoyo de PS Talents, lo consigue, y además de sensibilizarnos sobre este problema, nos permite disfrutar de un apartado artístico muy cuidado y algunos elementos metafóricos llenos de fuerza.

Más que un juego, se trata de una experiencia en VR para iniciar a los más jóvenes, y en ese sentido funciona a la perfección. Evidentemente, como aventura gráfica se queda muy corto, y el apartado técnico es bastante limitado.

Una experiencia única. Íntima conmovedora y de dirección artística impecable (con mención especial para la música) pero que arrastra algunos fallos técnicos, mucho más evidentes en esta versión de Nintendo Switch.

Está claro que Torrente 3 no es un juego demasiado exigente. Es más, si no fuera por su protagonista hubiera pasado sin pena ni gloria, pero precisamente el carisma de Torrent y el reflejo de su forma de hablar, de su "atletismo" y de todas sus bromas de mal gusto hacen que merezca la pena echarle un vistazo. Si sois fans de este policía mal hablado y corrupto, seguro que os vais a partir de risa, aunque en caso contrario no os vais a encontrar con ninguna maravilla. Y por supuesto, es sólo para adultos.