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En resumen, un RPG de acción repleto de posibilidades en todos los aspectos, que se ve empañado por problemas de rendimiento que se deben solucionar más pronto que tarde. No está a la altura de sus influencias y referentes, pero aporta toques muy originales que seguro se tendrán en cuenta para continuar evolucionando en el futuro.

Cuando este año parecía ya cerrado y las últimas semanas de diciembre se presentaban como un pequeño descanso de cara a los intensos doce próximos meses, Aeterna Noctis ha sorprendido a todo el mundo con un metroidvania deslumbrante a nivel audiovisual desafiante en su faceta jugable y con una gran cantidad y variedad de contenidos a completar. Si hubiese que sacarle alguna pega, solo se nos ocurriría una mayor profundidad en el sistema de combate, si bien es muy disfrutable y entretenido.

Alzarse con el premio Mejor Juego del Año en la VI Edición de los Premios PlayStation, y tener el apoyo de socios como PlayStation y KochMedia para llevar la comunicación y promoción del título ha permitido a los integrantes de Weird Beluga Studio centrarse en su principal tarea, trabajar a fondo en el desarrollo de Clid the Snail y lanzar al mercado el mejor producto posible. Sin lugar a dudas se trata de una de las propuestas más recomendadas en el panorama nacional independiente, y demuestra las enormes aptitudes de los creadores de cara a convertirse en un estudio referente en el futuro.

Alex Kidd in Miracle World nunca fue un plataformas sobresaliente, pero tuvo una enorme importancia dentro del catálogo de SEGA en su época y se merecía un regreso a la altura. Jankenteam ha tomado la buena base y nos regala un remake más que notable que sabe mantener la esencia del plataformeo 2D mientras se actualiza con una preciosa vertiente audiovisual y encima brinda modos de avance para todo tipo de públicos, ya sea el original para los puristas o vidas infinitas para quien llega neófito al género. Asimismo, no faltan nuevos niveles, un modo Bosh Rush y pequeños añadidos a nivel narrativo, quedando como gran inconveniente el control del personaje.

En definitiva, Song of Horror es una propuesta que mira con claridad hacia las obras y mecánicas del terror clásico, acertando prácticamente en todo lo que se propone implementar. Lo fácil hubiera sido hacer casi un ‘copia y pega’, pero Protocol Games ha logrado una identidad propia mediante diversas originales ideas introducidas en la narrativa y la evolución de la historia.