DeVuego ES_COR

Es cierto que Alien Spidy no es un juego para todos, pues su exigencia hará que los menos hábiles con el mando se desesperen. Pero si le damos una oportunidad, una vez hayamos entendido bien el sistema de juego, sus físicas y sobre todo, seamos unos maestros del lanzamiento de telarañas, nos encontramos con un título que aunque exigente, es realmente gratificante y premia la habilidad del jugador.

Alien Spidy es uno de esos lanzamientos que tiene un concepto inicial muy bueno pero fracasa en su ejecución. La idea de guiar una araña a través de escenarios plagados de obstáculos teniendo que hacer uso de nuestra capacidad para saltar y balancearnos con nuestra tela de araña es genial, si no fuera por lo difícil que resulta no fallar en demasiadas ocasiones debido sus problemas jugables. Y justamente eso, su impreciso control, es una tara demasiado importante para el tipo de producto del que estamos hablando, puesto que si algo se le pide a un plataformas es que no nos deje vendidos a las primeras de cambio.

Creo firmemente que Alien Spidy es un buen producto que posiblemente se merezca más nota de la que veis al final de este artículo. No digo ya que sea un plataformas complicado, sino que su dificultad me parece mal equilibrada, o ajustada, como prefiráis. Hubiese bastado con rebajar los requisitos de puntuación un poco, al menos en los primeros niveles, para encontrarnos con un título más amigable en consonancia con el carácter “simpaticote” de su protagonista. No obstante, si eres de esos jugadores a los que le apasionan los retos, Alien Spidy es un juego con el que vas a disfrutar como un enano. ¿El resto? Quizá debáis mirar a otro lado.