Zenith, ya disponible en digital, el 23 de septiembre en físico para PS4 y PC

Infinigon, un equipo de profesionales con más de 30 años de experiencia en videojuegos y un propósito común: crear videojuegos que recuperen el espíritu tradicional, nos brinda una nueva entrega enfocada a la acción RPG, Zenith. Ni más ni menos, se trata de un action RPG cargado de un humor desternillante, con multitud de referencias a clásicos del género, y con el que seguro que pasaréis unas buenas horas de juego y risas. ¡Explora ruinas! ¡Derrota monstruos! ¡Salva el mundo! Todo eso a lo que se dedican los grandes héroes.

El juego tiene una historia sólida, una experiencia insólita para un jugador con una trama atmosférica, que se desarrolla en un mundo ficticio lleno de fantasía y personajes poco ortodoxos. Nada de paranoias oníricas ni de tener que montarte tu propia historia.

• ¡Explora un mundo fantástico completo, con su mapamundi y todo!
• Enfréntate a jefazos enormes, peligrosos enemigos y adolescentes emos.
• Disfruta encontrando parodias y referencias. A ver si las pillas todas.
• Salva el mundo. Vale, un poco cliché, ¡pero es resultón!
• ¡Desbloquea nuevas habilidades y pégales una buena paliza a los que se crucen en tu camino añadiendo potentes castañazos al final de los combos!
• Refúgiate del cruel y sobrevalorado mundo real con una larga historia para un solo jugador.

https://youtu.be/eIiuEGayGi8

Te pondrás en la piel de Argus, el protagonista del juego, un mago con bastante humor que se retira buscando paz, pero se le hace difícil por culpa de los aventureros y sus complejos de “elegidos” .

Capturas in-game del videojuego:

Zenith ya está disponible en las tiendas digitales, pero sus versiones físicas verán la luz el próximo 23 de septiembre en PlayStation 4 y PC. Además, está previsto su lanzamiento digital también para Xbox One, aunque la fecha está aún por concretar.

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Autor

Carles Martínez

Escritor aficionado y artista frustrado. Apasionado por la filosofía y las buenas historias. Entusiasta de la narrativa y la estética. Mi obsesión por H.P. Lovecraft me trasladó al mundo del rol y, desde entonces, no puedo salir de él. «Ph'nglui mglw'nafh Cthulhu R'lyeh wgah'nagl fhtagn».