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Sombra – Intentando volver a casa mediante solo un botón

Ay, madre mía con los gatos… Tomaros esto como el suspiro del hermano (a la vez que padre) de 3 gatos y un perro. Y no debería quejarme porque de los 3 gatos (dos hembras y un macho) que tenemos en casa, solo uno se escapa para vivir sus propias aventuras o, quizás, quedar con sus colegas del barrio para contarse la vida un viernes por la noche. Los dueños de estos animales místicos a la vez que divertidos sabemos que no verlos en casa es un momento de angustia y desesperación, pero verles de nuevo rondando por las habitaciones como si no hubiese pasado nada al final se termina convirtiendo en un alivio temporal. No sé si, a raíz de estas situaciones, fue lo que motivó al solo dev Jose Francisco Martín Antequera «SytoDev» a desarrollar este Sombra, una pequeña aventura de acción y plataformas donde controlaremos a una gata de color negro y ojos verdosos utilizando únicamente un solo botón y a la que ayudaremos a volver a casa a través de los tres «mundos» que componen la campaña del juego.

Sombra es un plataformas que se desplaza de forma automática. Es decir, la gata estará corriendo por los escenarios y nosotros simplemente deberemos pulsar el botón en el momento justo (que puede ser el click izquierdo del ratón, la barra espaciadora del teclado o un botón del mando) para que vaya saltando sobre las diferentes superficies y también evite la gran cantidad de peligros que se irá encontrando en su regreso a casa. A medida vayamos avanzando por cada una de las cinco fases que forman parte de los «mundos» del juego, la gata Sombra irá encontrando nuevas mecánicas de forma casi obligada (saltar en las paredes, doble salto, planear y un dash) para poder superar tramos que antes eran imposibles al no tener la habilidad correspondiente. Al controlarse todo con un mismo botón, debo reconocer que la jugabilidad funciona suficientemente bien, pero en ocasiones da lugar a que las mecánicas de doble salto y el dash, por ejemplo, se solapen un poco ya que ambas requieren de un doble click aunque de diferente ritmo de pulsación. Es algo que a la larga simplemente se soluciona con la propia curva de aprendizaje, pues durante la segunda vuelta que pude darle a la campaña ese pequeño problema se resolvió levemente.

Pero aparte de su tipo de control, otro de los componentes importantes de Sombra son sus propios niveles, los cuales al final terminan formando un juego desafiante que va de menos a más. Podría haber aprovechado en el título de este análisis la reciente moda de llamar a todo «Celeste», pero con dicha mención ya os podréis imaginar que Sombra parece tomar referencia de ese tipo de plataformas para que el regreso a casa de la pequeña gata negra sea más un buen reto que un simple paseo por sus coloridos niveles. Pinchos, sierras, agua, lava, espinas… Todo ello colocado adrede a lo largo de un gran escenario que iremos descubriendo a cada paso que va dando el animal felino y donde, en un principio, costará entender cuál es realmente la ruta que deberemos tomar para llegar al siguiente checkpoint. Al final todos los caminos llevan a Roma, pero sí es cierto que el juego aprovecha diferentes superficies para que, en caso de caernos por algún hueco que no nos esperábamos, podamos retomar rápidamente la ruta principal que nos lleva hasta la salida del correspondiente mundo. Incluso también hay plataformas que están colocadas para facilitar el tránsito del nivel (cosa que pude comprobar en la segunda partida), aunque os aseguro que muchas veces tiraremos por la solución más bruta. Aún así, la pequeña Sombra terminará cayéndose por muchos huecos que, sobre todo, contendrán pinchos o charcos de agua y, al final, las infinitas 7 vidas felinas nos servirán más bien para aprender a mejorar nuestras rutas a base de mucho ensayo y error. No sabría decir la cantidad de veces que habré ronroneado por última vez, pero creo que habrán sido un centenar de reintentos en las 3 horas de la primera partida.

La variación del entorno que he comentado líneas atrás también se aprovecha para unos coleccionables en forma de pescaditos, los cuáles estarán escondidos en multitud de rincones a lo largo de los tres mundos de Sombra. Escondites que en ocasiones serán fáciles de encontrar y superar, pero que otras veces mantendrán e incluso aumentarán el reto comparado con las rutas principales. Aún así, una vez completado el juego, podremos volver a cualquiera de los checkpoints gracias a una de las últimas actualizaciones y esos pescaditos serán más sencillos de conseguir al contar ya con todas las habilidades de la gata negra. Estos peces servirán para desbloquear 11 aspectos diferentes que le podremos poner a Sombra y también para conseguir una divertida colección de fotos de la gata real que ha servido como musa para el desarrollo de este pequeño juego. Si os quedáis con ganas de más retos, al completar la aventura de Sombra se desbloqueará un Modo 9 vidas donde podremos rejugar la campaña pero con vidas limitadas, siendo un buen desafío que ya no será tan permisivo como el modo principal.

Por último, destacar el colorido pixel art de Sombra además también de señalar la fantástica banda sonora que Eduardo Guerra Arencibia ha compuesto para el juego. Unas canciones que ya no solo dotan de epicidad las aventuras de la pequeña gata negra, sino que además es una música muy agradable para suavizar el reto constante que ofrece el juego. Parte del juego lo he podido disfrutar sin problemas en una Steam Deck, a pesar de que aún no se haya revisado la compatibilidad del juego con el dispositivo portátil de Valve.

Conclusión

A pesar de ser un proyecto pequeño y, a su vez, el primer juego comercial de su desarrollador, fácilmente se puede considerar a Sombra como una alternativa interesante para los amantes de los plataformas gracias a esa jugabilidad enfocada en un solo botón y en la constante carrera de esta pequeña gata negra. Sombra es una corta e intensa aventura llena de buenos desafíos y de divertidos desbloqueables, destacando sobre todo la divertida colección de fotos de la verdadera gata negra que ha dado nombre a este juego.

Autor

Jugando a videojuegos desde que Spyro The Dragon y una PS One llegaron a mi vida. Actualmente disfruto descubriendo juegos españoles tanto en mi blog personal "Tukunime" como en otras redes sociales o proyectos.

Santiago Sánchez

Jugando a videojuegos desde que Spyro The Dragon y una PS One llegaron a mi vida. Actualmente disfruto descubriendo juegos españoles tanto en mi blog personal "Tukunime" como en otras redes sociales o proyectos.

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