DeVuego BD

Prepárate para una aventura de 4-5 horas que te sorprenderá, te maravillará y te emocionará. Todo eso, junto con el entorno que ofrece, y la gran cantidad de detalles dentro de su historia, son lo que hacen especial y casi perfecto a Call of the Sea. Uno de mis juegos del año.

Naught es toda una sorpresa: un plataformas 2D donde no movemos al personaje sino al entorno, y que nos presenta todo un desafío en dos modos de juegos adictivos. De estética simple y juego fluido, es una opción perfecta para pasar el rato. Aunque no innova mucho a lo largo de sus niveles y se nos puede quedar algo corto.

Palindrome Syndrome: Scape Room se cuela sin hacer mucho ruido entre las propuestas actuales, se trata de una experiencia corta pero satisfactoria al plantearnos varios acertijos y pruebas a lo largo y ancho de una nave espacial en la que despertamos sin saber qué hacemos allí. Si bien algunos puzzles pueden resultar sencillos y algún punto del apartado gráfico flojea, estamos ante un título con bastante potencial para estar desarrollado por dos personas. Si te gustan los escape room en la vida real, te gustará esta oferta virtual.

Pese a que Mezmeratu es un juego difícil y que puede causarte más de un disgusto, sobre todo si te rindes fácilmente, es una experiencia que merece la pena probar. Es todo un desafío que cuenta con mucho carisma gracias a lo extraño de su historia, lo único de su apartado visual y su buena banda sonora.

1971 Project Helios es un buen aporte al género táctico que incopora algunas novedades que lo hacen único, no sin pecar en algunos aspectos.

Treasure Rangers es un plataformas con puzles que tiene una dificultad mínima pero es muy agradable de jugar. Con cuatro personajes jugables únicos y un mensaje muy importante sobre el autismo podemos pasar unas horas entretenidos, pero no podemos pedirle mucho más.

Un juego sencillo y divertido con una estética encantadora que te traerá unas cuantas horas de diversión. Eso sí... no esperes dificultad alguna.

Etherborn nos hará pasar un buen rato con su plataformeo anti-gravedad, pero el juego no tiene mucho más. Es divertido e incluso desafiante de jugar, pero se trata de una experiencia corta y con una historia descafeinada.

Estamos ante un título sencillo pero bien hecho. Tiene pequeños problemas en los saltos, alguna ralentización y puede resultar sencillo, pero no hay que olvidar que estamos ante una propuesta para toda la familia que nos hará revivir los años 90 y sus juegos de plataforma 3D.

A pesar de suponer una pequeña decepción, hay que reconocer que Super Soccer Blast ofrece destellos de calidad y nos puede dar algunas tardes de fútbol divertidas, especialmente con amigos.