FICHA DE CRÍTICA

GYLT es una aventura amena, simple, fácil de jugar. Tras el brillo de su mensaje se esconde un juego con luces y sombras. Sus mecánicas están representadas de la forma en la que lo hicieron hace dos generaciones. Falta ambición en el diseño de niveles. Por momentos parece que repunta, pero la falsa sensación de exploración esconde un título tremendamente lineal. Es una pena, puesto que reúne todos los ingredientes para poder haber sido más grande. Los encuentros van tornándose monótonos conforme avanzamos. Falta variedad, más arquetipos de enemigo. Cuando ocurre, ya casi estamos dentro de la recta final, por lo que no da tiempo a saborearlo. En líneas generales es una experiencia que merece la pena vivir por la forma tan creativa de enfrentarse a una lacra como el acoso escolar; por la personalidad que denota su excelsa dirección visual. Dura lo que tiene que durar (entree 4 y 6 horas), ni más ni menos.

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70
 
10/12/2019

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