FICHA DE CRÍTICA

Stay no es un juego para todos los públicos. La mayor parte del tiempo estaremos leyendo y una pequeña parte tomando decisiones ocasionales y resolviendo puzles. Sin embargo es un juego que atrapa y que transmite esa sensación de aislamiento y desasosiego como pocos. Es difícil no recomendar probar la experiencia que ofrece Stay, porque a poco que empaticemos con Quinn o nos metamos en su historia estaremos atrapados y querremos saber más y más hasta completarlo. De nuevo un gran trabajo que refuerza la realidad palpable del buen estado que atraviesa el desarrollo de videojuegos español.

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14/07/2018

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