FICHA DE CRÍTICA

Candle: The power of flame utiliza herramientas viejas para extender la duración de un juego que pide a gritos terminarse pronto. Por momentos recuerda a grandes clásicos pero, por más que compartan virtudes y errores, los separan casi tres décadas de evolución que hacen que hoy no puedan perdonarse las mismas falencias. Un viejo jugador de aventuras gráficas encontrará el camino, pero la gran mayoría de la audiencia sólo hallará frustraciones.

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25/07/2018

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