FICHA DE CRÍTICA

Scrapland, con sus aciertos y sus errores, es un ejemplo de cómo se debe de hacer un videojuego: completo y bien hecho, además de demostrar que se puede jugar en un mundo rico y complejo sin tener que ser un juego difícil. Es inteligente, divertido y para todos los públicos. Sólo algunos errores de concepto y diseño de niveles le restan puntos de adicción.

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19/04/2005

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