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Desde hace años vivimos en un presente donde el recurso más importante en nuestro sistema ya no es la producción, sino la información. Para conocer al detalle el estado de cualquier asunto necesitamos información, para lanzar cualquier tipo de iniciativa necesitamos primero saber cómo está el medio donde vamos a lanzarnos, en definitiva, para todo necesitamos informarnos primero. Por ello el acceso a la información es tan importante y necesario y por eso, la información básica y necesaria se nos esconde mientras se nos sepulta con información innecesaria.
Muy pocas veces, en nuestra era de la información, llegaremos a los datos que deseamos conocer en poco tiempo, normalmente exigirá una larga búsqueda, tanto física como digital. Son de alabar iniciativas como la que desarrolla esta página, DeVuego, donde se le ofrece al lector una completa base de datos cargada con todas las producciones videolúdicas del sector español desde hace varias décadas. Han creado un lugar perfecto para conocer el estado de la industria cultural más importante de nuestro país, y esto mismo es lo que vamos a intentar realizar en esta serie de entradas ¿cómo ha cambiado el sector de los videojuegos en España? ¿Cómo es en la actualidad? Y ¿cómo ha llegado hasta aquí? Estás serán las tres preguntas fundamentales que trataremos de responder.
Para responder a las preguntas planteadas utilizaremos, como es lógico y queda patente, la base de datos de esta misma página. Es justo anunciar que la base de datos de DeVuego aún no se encuentra totalmente completa, sino que existen huecos y no aparecen algunas desarrolladoras. Para paliar este pequeño vacío intentaremos cruzar los datos con otros lugares de vital importancia, como el Libro Blanco del Desarrollo Español de Videojuegos, para conocer la exactitud de la información y poder extraer conclusiones interesantes para los lectores. Pasemos, pues, a las respuestas.
De un vistazo general la página nos indica que, en el momento de redactar este artículo, existen en la Base de Datos: 745 juegos, 1536 desarrolladores y 200 estudios. De estos datos podemos extraer una serie de conclusiones, el primero de ellos y el más lógico es la estrechez de los estudios españoles, quienes cuentan con 1536 desarrolladores para 200 estudios, siendo muchos de estos desarrolladores personas inactivas dentro del sector, como Azpiri. Cruzando los números la cifra que nos ofrece es un número medio de 7 desarrolladores por estudio, que muy probablemente sea menor, ya que algunos de estos títulos lanzados en España son desarrollados por una sola persona. Por lo tanto, la primera conclusión es clara y por todos conocida, las ventas de videojuegos en España no son autóctonas, sino que son principalmente externas. Los videojuegos que se venden en España no se producen en España. Esto, a primera vista, no puede parecer un problema, sin embargo si escarbamos un poco en la superficie si podemos encontrar una serie de problemas ligados a este fenómeno.
La producción siempre es necesaria y es un paso fundamental para que se creen mercados de verdadero valor. Pensemos en un circuito comercial estándar donde un individuo produce materia prima y otro individuo compra esa materia prima a un pequeño precio para procesarla y venderla de nuevo, a un precio mucho mayor, al primer individuo ¿Quién saldría beneficiado de este trato? No hay que desentrañar mucho la madeja para comprender que es el segundo individuo quien sale beneficiado de este trato. En este ejemplo el primer individuo sería el escenario desarrollador español quien produce la materia prima (desarrolladores, juegos lanzados bajo distribuidoras extranjeras, ideas, códigos, etc.) y el segundo individuo los mercados internacionales, quienes compran bajo un precio mínimo estos productos, los transforman, los envuelven y nos venden los títulos a 60€ cada uno. ¿No sería más eficiente y mucho más provechoso para el escenario español que la propia materia prima desarrollada en el país se manufacturara y se vendiera, desde aquí, a los demás países?
Si miramos detenidamente los últimos tres juegos que más popularidad y relevancia en los medios sociales han tenido en el último año, Gods Will be Watching, Randal’s Monday y Dead Synchronicity, los tres han encontrado su distribuidor en el extranjero, aun existiendo en España, según nuestra base de datos 76 editoras (estas 76 editoras no son propiamente españolas, sino que son distribuidoras que han acogido a videojuegos españoles, el número de editoras patrias es, entonces, mucho menor), Devolver Digital y Daedalic Entertainment, una estadounidense y la otra alemana ¿por qué, en España, no existen distribuidoras potentes como hace unos años lo era FX Interactive?
Por supuesto, esta pregunta tiene una fácil respuesta, no existe un mercado español para los juegos españoles, un producto lanzado en España no puede salir adelante sólo con las ventas cosechadas en nuestra Península, debe salir fuera obligatoriamente para intentar rentabilizar sus próximos proyectos. ¿Y esto a qué se debe? Principalmente a las tendencias de mercado de España, donde los géneros más disfrutados no son precisamente la aventura gráfica o los puzles, género a los que pertenecen los tres ejemplos que hemos mencionado anteriormente en el texto ¿cuál es la tendencia entonces? ¿Por qué no hay distribuidoras? ¿Por qué no sale rentable hacer videojuegos en España cuando nuestro país en uno de las más potentes en Europa dentro del gasto en videojuegos y de la inserción tecnológica en nuestra vida cotidiana? A todas estas preguntas intentaremos ir respondiendo en las siguientes entradas que iremos escribiendo, estad atentos.
Autor
Licenciado en Historia, doctorado en Historia Medieval, arqueólogo en prácticas, redactor y escritor novel, apasionado de las aventuras gráficas, la alta estrategia, rol y FPS para un solo jugador.
8 Comments
David
No entiendo cuál es la pregunta a la que buscas responder.. Cuando preguntas por qué no es rentable hacer videojuegos en España ¿te refieres a su publicación y distribución, o al desarrollador?
Al desarrollador sí que le sale a cuenta, es un mercado global y de lanzamientos globales. Para el desarrollador el problema es crear y lanzar el producto, ya que montar empresa y financiarla en España (o ser autónomo) es prohibitivo comparado con el resto de países.
A nivel de distribución, por mucho que España sea potente en gasto, el grueso del mercado sigue siendo USA, y quien tiene más contactos y facilidades para mover un producto allí siempre será un distribuidor de allí.
Alberto Venegas
La pregunta es clara, siento que no haya quedado clara, y es ¿cómo es el sector del videojuego en España? ¿cómo hemos llegado hasta aquí? Las siguientes entradas van a tener que ver más con condicionantes culturales, sociales y de mercado apoyándome en datos extraídos de esta página y del Libro Blanco del Desarrollo del Videojuego en España.
A lo que preguntas, me refiero al desarrollador español y a las distribuidoras españolas en España, no fuera de ella, con los ejemplos he intentado plasmar esto mismo, como títulos desarrollados en España tienen que buscar distribuidoras fuera de España.
En cuanto al último párrafo entramos en una contradicción aparente, si el mercado es global ¿por qué tendría una distribuidora española problemas para distribuir allí? por supuesto por trabas y mecanismos legales y económicos que también intentaremos desarrollar en las siguientes entradas.
Como he mencionado también al compañero de más arriba, muchísimas gracias por tu comentario, respuestas como esta, fundamentadas y lógicas, son las que animan a seguir escribiendo.
Serk
Bastante en desacuerdo con el artículo, creo que se parte de datos correctos, pero se llegan a conclusiones erróneas.
Los juegos más vendidos en España son (en su mayoría), los mismos juegos que son los más vendidos en Francia, Alemania, UK, y el resto del mundo. Son los triple A como GTA, Assassin’s Creed y similares, y las franquicias establecidas. El motivo de que en España no se consuman juegos españoles es que los estudios españoles no tienen capacidad de realizar este tipo de proyectos, por falta de capital (principalmente) y de tejido industrial.
Pero aun así, el grueso de beneficios de cualquier videojuego (indie o AAA), realizado por un estudio de cualquier pais, siempre va a venir del mercado extranjero (o sería mejor decir, del mercado global). Se trata simplemente de demografía pura y dura: en un mercado global, siempre va a haber más clientes fuera de tu país que en él (salvo que tu pais sea USA, China, o uno de estos gigantes), asi que limitarse a tu pais es reducir tu número de clientes potenciales a un pequeño porcentaje del total, innecesariamente.
Las plataformas de distribución no “reempaquetan” los juegos y se quedan con todos los beneficios. Esto podria haber sido cierto en el mercado físico, pero actualmente en digital (que es el canal de distribucion principal de los estudios españoles, tanto PC como móbiles, etc…), estas plataformas precisamente sirven para ACCEDER a este mercado global.
Y cuando los estudios pueden acceder a un mercado global de forma directa, el rol del editor desaparece. Eso es lo le pasó a FX, fue Steam quien la mató a base de eliminar su hueco en el mercado. El modelo de negocio de FX consistía precisamente en coger juegos de estudios extranjeros, “reempaquetarlos”, y venderlos en España. Pero en un mercado global, esos estudios pueden “puentear” al editor y vender en España directamente a través de Steam, haciendo ese modelo insostenible.
Pero igualmente los estudios españoles pueden “puentear” a los antiguos editores de otros paises, y vender directamente en Francia, Alemania, USA, o donde sea. Ahora el mercado es mucho más democrático que nunca. Incluso aunque mi juego no venda una copia en España, puede ser un éxito a base de sumar las ventas realizadas a nivel mundial.
Por tanto, la falta de industria en España es un problema interno. Es más complicado hacer juegos en España por la misma razón que es menos rentable realizar casi cualquier actividad empresarial. Excesiva regulación, falta de cultura empresarial, falta de capital, etc…
Alberto Venegas
En parte estoy muy de acuerdo contigo, especialmente en lo relacionado con el mercado global, es de lógica y sentido común intentar que tus productos lleguen a cuanta más gente mejor. Sin embargo no estoy de acuerdo en el desarrollo, el mercado interno es importantísimo, de hecho las dos potencias nacionales dentro del sector del videojuego son precisamente EE.UU y Japón, las dos que apostaron por su mercado interior, aún hoy en día muchos videojuegos realizados en Japón no llegan a otros países a no ser que sea mediante importación directa, con las consiguientes limitaciones que esto supone. Además hay un dato esclarecedor, las dos principales videoconsolas, a la que habría que sumarle una tercera en discordia, provienen precisamente de estos países, EE.UU y Japón. El mercado interior incentiva a la producción, sin mercado interior lo único que tenga entonces es el exterior y la dependencia de estos países.
Sin embargo, si existieran editoras nacionales y productos nacionales que supieran enlazar con el público español se darían las condiciones necesarias para la creación del tejido industrial que tu mencionas, pero al depender casi en exclusiva del comercio exterior ¿para qué crear ese tejido nacional, si dependemos del internacional?
El videojuego, en la actualidad, no debe entenderse como un fenómeno aislado y con una identidad propia, sino que debe entenderse dentro de los mismos esquemas donde se encuentran el resto de las industrias culturales y realizando un paralelismo poco indicado ¿por qué los actores y directores españoles se empeñan tanto en crear un mercado interior para sus películas? por que saben que la fortaleza del sector depende, en gran medida, del mercado nacional.
Muchísimas gracias por tu comentario, apoya y sustenta a la perfección al texto, podría entrar perfectamente como entrada en la web, gracias.
Serk
Creo que sigues analizando desde el punto de vista de años atrás, ignorando los cambios en los sistemas de distribución de la última decada o más.
Me pones el ejemplo de USA (con un mercado interno casi 7 veces más grande que el español), que me parece un buen ejemplo. El caso sería equivalente a una compañía de juegos en California que decidiera que sólo va a vender su juego en California, ignorando el resto de USA.
Como es lógico, ninguna compañía relevante hizo eso, sino que todas intentaron vender sus productos a cuanta más gente posible, accediendo a todo el mercado que podían (en su caso, los más de 300 millones de americanos). El disponer de ese enorme mercado interno fue una clara ventaja para las compañías en USA, en un momento en que acceder al mercado internacional era caro y complicado.
¡Pero ya no vivimos en esa época! A día de hoy, una compañía española tiene ya acceso al mercado global. Igual que la compañía californiana no se conformó con vender sólo en California, e intentó llegar a todo el mercado al que podía acceder, lo mismo debemos hacer ahora desde España.
No veo por qué no podemos desarrollar una industria propia y un tejido industrial que se base precisamente en la exportación. Especialmente ya que tenemos la prueba de que se puede hacer en otros países similares y de nuestro entorno que ya lo han conseguido. Y me parece que estos países deben ser el modelo a seguir, ya que son mucho más similares a nosotros que USA o Japón (que cuenta con más del doble de población de España, y un mercado proporcionalmente muy superior dado el acceso tecnológico, capital, renta, etc…).
Por ejemplo, la tercera potencia en desarrollo de juegos es Canadá, con una población similar o inferior a la española. Las empresas canadienses desarrollan juegos que se venden en todo mundo, y que no serían rentables de limitarse sólo a su propio mercado interno.
Pero un ejemplo aún más cercano y llamativo es Suecia. Suecia cuenta con tan sólo 10 millones de habitantes, y con estudios como DICE (creadores de las sagas Battlefield y Mirror’s Edge), la distribuidora Paradox (autores de Europa Universales, Crusader’s Kings…), MachineGames (los últimos Wolfenstein), Frictional Games (Penumbra, Amnesia), Mojang (Minecraft)…
Estos juegos no se basan en el mercado sueco. Es más, lo ignoran completamente tratándolo como un país más en un mercado global. No sé si Minecraft está siquiera disponible en sueco, pero desde luego no fue un juego lanzado al mercado sueco, sino que su éxito se basó en saltar directamente al mercado global a través de Internet, y aceptar ventas de todo el mundo.
Igualmente, Battlefield no hubiera sido el éxito que fue si solo se hubiera vendido inicialmente en Suecia. Con 10m de habitantes sencillamente no había un mercado suficiente como para que un desarrollo AAA de ese calibre compensara económicamente. Era necesario venderlo fuera.
Me parece que este contraejemplo demuestran claramente que se puede crear una industria fuerte, y un tejido industrial, sin depender del tamaño del mercado interno local. Lo que hace falta es inversión (Battlefield no se hace con dos programadores y un grafista), gente preparada, menos trabas, y desde luego enfocar el modelo de negocio a la exportación hacia el mercado global.
En cuanto al cine, no me parece que el modelo del cine español deba ser ejemplo a seguir, ya que a dia de hoy es mayoritariamente deficitario. Si la estrategia es hacer contenidos para el mercado español, claramente no está funcionando. Y si hablamos de modelos de cine exitosos, de nuevo toca ir a Hollywood, que tiene un mercado interno enorme, y que además distribuye sus películas a todo el mundo.
Tampoco me parece que el ejemplo del cine sea el más apropiado, ya que la forma en que funciona ese mercado es bastante distinta al de los videojuegos (salas de cine, productoras, etc…). En el caso del videojuego, hay plataformas de fácil acceso a los desarrolladores que permiten llegar al mercado internacional sin pasar por el aro de editores y productoras.
Alberto Venegas
Gracias por la respuesta, como digo, igual de fundamentadas y validas que una entrada de la web.
Atendiendo a lo que comentas, creo que cometes una serie de problemas de percepción o conceptuales, el primero es mezclar y meter en el mismo saco el desarrollo y la distribución y la venta de videojuegos, el segundo asumir que la intención de mi comentario y entrada es defender el desarrollo de videojuegos en España para su venta únicamente en España, y el tercero pensar que el modelo del cine es muy diferente.
Con respecto al primero, el desarrollo de videojuegos genera una serie de beneficios secundarios en el país donde se encuentra, como por ejemplo la creación de empleos, la generación de un tejido industrial, la inclusión de los videojuegos en la educación, tanto en su faceta tecnológica como cultural, y sobre todo se crea una cultura del videojuego. Muy diferente si únicamente dependemos de los lanzamientos exteriores. Por tanto, el desarrollo de videojuegos estaría más ligado quizás a los sectores productivos del país, mientras que la venta y la distribución estaría ligado a los sectores de consumo del país, el primero generaría más beneficios para el país que el primero.
La segunda cuestión es lógica y tienes toda la razón, perdona si no ha quedado claro en la entrada o en el comentario, pero nunca he mencionado que los videojuegos que se desarrollen en España únicamente deben consumirse en España, eso es una supina idiotez empresarial si alguien decide llevarla a cabo. Yo defiendo en la entrada como el desarrollo de videojuegos debe seguir su línea dentro del país, recogiendo tu ejemplo de Suecia, Paradox desarrolla en Suecia sus juegos de alta estrategia y desde Suecia los vende a todo el mundo, y también dentro de Suecia, un país con un gran mercado interior de videojuegos. Esta fuerza en el desarrollo de videojuegos le permite crear juegos, como dices, Triple AAA, aquí en España hoy poy hoy sería imposible desarrollar este tipo de juegos. Por tanto, en un mercado y un mundo global como el nuestro quedarse únicamente dentro de las fronteras de un país es una locura, se debe salir fuera, pero si sale fuera después de que todo el proceso de desarrollo y distribución del videojuego se ha llevado a cabo dentro del país, pues mucho mejor.
La tercera cuestión, precisamente lo que mencionas del modelo de Hollywood, las películas realizadas en los EE.UU, muchas de ellas por no decir todas, se realizan pensando en el mercado interior del país, los mensajes que portan, la ideología que blanden son típicamente estadounidense, pero que a través de la globalización cultural aceptamos como propias, pero ellos piensan antes en su mercado interior, y luego, si acaso, en el exterior. Por lo tanto sería un modelo a seguir cuando un mercado interior se haya afianzado en el país. Y bueno, las plataformas de acceso al cine, y sobre todo a la televisión, no difieren en esencia de las del videojuego, sobre todo con la irrupción de servicios como Netflix.
PD: Esta conversación me ha hecho pensar sobre el fenómeno e intentaré explicar mi postura en una entrada relacionada dentro de unos días, un “spin-off” de esta :D
Serk
Estoy en tablet. asi que respondo en corto:
1 – cierto. Son aspectos distintos, pero creo que la diferencia es menor que hace años. Con plataformas online el propio desarrollador en muchos casos autopublica. Parecido a Amazon: un autor puede publicar su propio libro, pero tambien puede ir a traves de una editora
2 – de acuerdo en eso entonces
3 – de nuevo es un tema de escala. USA, India o China pueden montar una industria fuerte basada en el mercado interno porque son gigantes. Nosotros no. Tenemos que usar un modelo distinto, y pensar en exportar desde el primer momento. Netflix es interesante y puede cambiar esto, pero el modelo digital aun no está tan avanzado como en videojuegos, y el cine depende mucho de las salas a dia de hoy
Juanma
Buenas señor Alberto,
Desde mi punto de vista el problema es que estamos repitiendo los errores de los 80, con la (afortunada) diferencia que los desarrolladores tienen la oportunidad de llevar sus productos a distribuidores extranjeros. En un mercado global han de existir publishers con una orientación global pero que comprendan la idiosincrasia patria. De momento de esto no tenemos por aquí. No hay referentes. Se está intentando, pero de momento las cosa no pasa de ahí. Que Devolver o Deadalic se fijaran antes que un publisher español en títulos como Gods Will be Watching o Dead Synchronicity no hace sino demostrar el fracaso de aquellos que deberían estar ojeando el mercado en busca de nuevas joyas dentro del panorama patrio.