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Si en el sector del videojuego en España hay algo claro es que las mejores aventuras gráficas salen de Pendulo Studios. Juguemos a la que juguemos nos vamos a divertir; desde la primera Igor: Objetivo Uikokahonia, a la última, New York Crimes. Pero, si de entre todo su catálogo hay que elegir uno que destaque por encima de los demás, mucha gente se quedaría con la saga Runaway.
Runaway se puede considerar, salvando las distancias, el Broken Sword español. Brian Basco no es tan mítico como George Stobbart, pero ambos son personajes que todos los fans de este género de videojuegos deben conocer.
La primera aventura, Runaway: A Road Adventure, salió a la luz en el año 2001, distribuido por la ya extinta Dinamic Multimedia. Posteriormente sería FX Interactive quien distribuiría el juego, una edición más pulida y sin los bugs que tenía la primera versión.
El protagonista de esta aventura es Brian Basco, un jóven estudiante que consigue una beca en la universidad de Berkeley. Pero durante el viaje una chica se cruza en su camino y la atropella. Brian la lleva al hospital, donde ella le cuenta que unos mafiosos quieren encontrarla y matarla. Nuestro jóven estudiante decide quedarse a cuidar de ella, hecho que cambiará su vida para siempre.
El argumento nos hará recorrer buena parte de américa y conocer a unos personajes que van desde una de las mejores hackers del mundo, hasta unas drags queens perdidas en el desierto. La historia comienza con un atropello, pero pronto Brian se ve envuelto en una aventura llena de asesinatos, mafiosos, indios y dinero, mucho dinero. Desde el primer momento nos engancharemos a la trama, que avanza a un ritmo vertiginoso en los tres primeros capítulos; lamentablemente el final no está a la altura del comienzo, pero tampoco decepcionará.
Los personajes tienen una personalidad bien definida, aunque solo se profundiza en Brian y Gina. La evolución de Brian es evidente, comienza como un chico muy soso y pronto demuestra que tiene más valor del que en un principio parece. Gina varía un poco menos, pero es una chica que guarda muchas sorpresas que poco a poco iremos descubriendo.
Se echa de menos algo más de humor en los comentarios, no es un juego soso pero no hay tantas escenas graciosas como en otros juegos de este género. Además, los jugadores echarán en falta más objetos secundarios para analizar y sobre los que Brian haga comentarios, aunque no tengan ninguna relevancia. Por suerte, este aspecto se mejora en las secuelas.
Todos los escenarios son en 2D, dibujados a mano, llenos de objetos y muy bien detallados. Los elementos interactuables son exactamente igual que los estáticos, algo que complica al jugador la tarea de exploración y tendrá que analizar muy bien cada nivel para encontrar todos los objetos.
Los personajes (25 en total) están hechos en 3D con la técnica Cel-Shading y se integran perfectamente en los escenarios. El único “pero” que se puede achacar al juego es que en algunos momentos los personajes no se mueven de forma fluida y los movimientos quedan bastante falsos; pero es algo que se obvia fácilmente.
Además del gameplay, contamos con 30 minutos de escenas cinemáticas que nos cuentan la historia; escenas que, incomprensiblemente, tienen menos calidad que el juego en sí. El efecto de luces es bastante pobre y en ocasiones se verán borrosos los entornos oscuros, además, los personajes son totalmente inexpresivos y los movimientos de la boca no van coordinados con el sonido.
El apartado sonoro comienza de forma inmejorable, con el tema “Runaway” interpretado por el grupo Liquor, que dará un toque peliculero a los créditos iniciales y finales del juego. Pero es un tema concreto, pues durante toda la aventura el juego se limita a poner melodías que solo acompañan y no adquieren nada de protagonismo.
Los efectos sonoros son de calidad, escucharemos de forma clara los pasos de Brian, los movimientos que hace al buscar en armarios, al abrir puertas… bastante mejor este aspecto que la banda sonora.
Por último hay que destacar el gran trabajo de doblaje del juego.Todas las voces (salvo un par) son perfectas y solo suenan falsas cuando los personajes se asustan y se ponen a gritar. Es una lástima que el doblaje no se trabaje tanto para el videojuego como para las películas.
Runaway es un point and click, es decir, con el ratón controlamos todos los movimientos de Brian, que básicamente serán moverse e interactuar con los objetos. La mecánica del juego, como en casi todas las aventuras gráficas, se basa en coger objetos y usarlos, de formas a veces inverosímiles, para solucionar los problemas que se le plantean al protagonista. A veces un objeto habrá que entregarlo a un personaje; en otras ocasiones habrá que usar otro objeto con un elemento del escenario; en algún momento habrá que combinar dos objetos para formar otro… hay varias posibilidades. La base del videojuego son esos puzzles, pero hay algunos que dan un toque diferente al juego, aunque lamentablemente son pocos: un pequeño acertijo de sonidos, una caja fuerte y poco más.
Runaway: A Road Adventure no es un juego difícil; los acertijos no son obvios pero con reflexionar un poco encontraremos la solución. Solo hay algún punto en que la solución al problema es tan inverosímil y alocada que será casi imposible de adivinar, algo que nos hará usar la guía de forma casi inevitable. Por otro lado, también podremos tener problemas para encontrar ciertos objetos en el escenario, pero es cuestión de analizar bien cada nivel y varias veces, pues algunos objetos solo podremos cogerlos tras realizar ciertas acciones.
Contamos con 6 niveles, pero más bien diríamos cinco y medio, pues el número cinco apenas es un problema. Cada nivel tiene sus propios objetos y ninguno se almacena para el siguiente nivel.
Los expertos en este tipo de juegos verán Runaway como una buena aventura gráfica, pero se les hará corta. Los novatos encontrarán en Runaway una gran vía para introducirse en este género, con una dificultad muy accesible y una buena historia.
Autor
Pese a mi continua obsesión con la literatura, los videojuegos y el deporte, logré acabar mis estudios de filología. Resido en Italia y adoro la pizza.
2 Comments
Yova Turnes
Una aventura gráfica a cargo de Péndulo Studios es una apuesta segura, pero creo que esta es de las más inspiradas que han tenido. La recuerdo con cariño porque conocí al estudio con Hollywood Monsters y esta fue la siguiente y por tanto la esperaba con muchas ansias. Juegazo